Benjamín Guzmán Castillo
Abogado, maestro y poeta. Nació el 31 de marzo de 1874 camino a la ciudad de Sucre y falleció el año 1931 en Cochabamba. Sus padres fueron el coronel Benigno Guzmán y la señora Dominga Vera Castillo de Guzmán, ambos fallecieron cuando el poeta se encontraba en su primer año de instrucción facultativa teológica. Estudió abogacía y fue el 6 de noviembre de 1896 cuando rindió su examen de grado, logrando así el título de Abogado en la Corte Superior de la capital de la República, Sucre. Fue presidente, con apenas veinticuatro años, de la Sociedad Literaria “Ricardo Mujía”. Se casó con Carmen Careaga, con quien tuvo una hija a la que llamaron Carmen. Junto a su esposa dirigieron liceos para señoritas impulsando el arte y la ciencia. También fue amigo cercano del círculo liberal; asistió y proclamó un discurso para el candidato, en ese entonces, José Gutiérrez Guerra en una fiesta campestre ofrecida en la ciudad de Sucre en medio de la campaña electoral.
Entre sus labores como educador se encuentran: la fundación, en 1892, de una escuelita de niños campesinos en la Glorieta*; fue voluntario en el Asilo de Huérfanos de Santa Clotilde; sirvió de preceptor de escuelas particulares, tiempo después colaboró como profesor de matemática en el Colegio Seminario y trabajó en el Colegio Nacional Junín; también fue profesor en la 5º Escuela Municipal, creada por el presidente municipal Dr. Adolfo Siles; parte del Consejo universitario y apoyó en escuelas rurales; director y maestro, junto a su esposa, del Colegio 25 de mayo y el instituto El Corazón de María. Uno de sus mayores aportes fue la fundación, en 1903, en la ciudad de Sucre, de la escuela nocturna Pastor Sainz para obreros y clase artesana, encomendada al filántropo don Pastor Sainz; en Potosí dirigió y fundó el colegio primario de niños en la ciudad de Tupiza; fue inspector y director técnico de las escuelas municipales de Sud Chichas; asesor técnico ad honorem de las escuelas comunales de la ciudad de Uyuni. Asimismo, fue rector de la Universidad de San Agustín de Oruro, catedrático en la Escuela de Minas y en 1913 fue nombrado Oficial Mayor, Inspector y Asesor Técnico del Ministerio de Instrucción y Agricultura y subsecretario del Ministerio de Instrucción Pública. Fue reconocido por todos sus aportes como un innovador. Una carta abierta escrita por Federico Ruck Uriboro dicta «Cábete a ti el orgullo y la gloria de ser hoy en Bolivia el representante genuino y único de la trascendental innovación que la pedagogía psicológica preconiza».
Gracias a su vocación educativa fundó su librería y respectiva imprenta donde publicó varias de sus cartillas educativas. De sus textos educativos conocemos: Nomenclaturas escolares (1900), Geografía patria (1900), Anatomía y fisiología humanas para el 4º grado de instrucción primaria o clase preparatoria de la secundaria (1901), Historia Patria (1901), Geografía patria para el 4º grado de instrucción primaria o clase preparatoria de la secundaria (1901), La educación de la raza indígena (1917), entre otras cartillas y textos educativos. Resalta entre estos, Para el hogar y la escuela (1989), un compilado de poemas infantiles, que fueron reeditados con financiamiento del Ministerio de Educación a solicitud de la profesora Carmen Guzmán de Mier, hija del poeta. Esta publicación se llevó a cabo por su valor educativo y aporte a la patria; ya que fue considerado «un puñado de gritos del alma infantil para hacer de la escuela la plenitud vivencial del goce…» (1989: 5).
De su faceta como escritor de literatura, Ecos de un alma (1897) es su primera obra conocida, dividida en seis partes y con un total de 77 poemas. En relación a esta obra, Ricardo Mujía afirma que Benjamín Guzmán es un poeta cuyo arte está macerando. Afirma que «produce mucho» y debe cuidar la pluma para refinar el trabajo. No lo clasifica en ninguna escuela porque, por un lado, Guzmán es joven aún y su gusto se modificará y, por otro, Mujía se considera enemigo de las clasificaciones. «Patria, hogar, amor, fe» son el fondo de estos cantos juveniles, concluye el crítico. Cielo (1898), su segunda obra publicada, es un diario dedicado a su esposa donde narra los momentos que ha vivido a su lado, la separación que sufren porque debe marchar a la guerra, y el deceso de su amada. La heroína (s.f.), Los hijos de mayo (s.f.) y Luchas de amor (s.f.) son obras teatrales leídas y presentadas en Sucre. Lo confirma José Antezana en el prólogo de la primera edición de Ecos de un alma: «entre los hermosos dramas que de él hemos leído recordamos por el momento: La heroína y Los hijos de mayo» (1972: 8). Guzmán también incursionó en los monólogos en verso, de los que se tiene noticia son: La vuelta del soldado (1905) y Memorias de un minero (1909). Guzmán fue un prolífico escritor, colaboró con sus versos en varios periódicos; destacan algunos poemas como «Himno a los boy scout», «Acuarelas» (dedicado a su maestro Ricardo Mujía), «Fray Maydagan», un poema dividido en seis partes sobre la lucha entre mantener la tentación y los votos.
El 14 de noviembre de 1917 se publicaron en la prensa del país artículos celebrando las bodas de plata de Benjamín Guzmán; se celebraron veinticinco años, cuatro meses y dieciocho años de su servicio a la educación. Fue por estas fechas, justamente, Guzmán solicitó su jubilación temprana, que, dicho sea de paso, fue otorgada en primer grado (pago total de sus honorarios previo como subsecretario); esto en reconocimiento a toda la labor que llevó a cabo en pos de la educación boliviana. Ya jubilado se sabe que se dedicó a ser «misionero de amor y americanismo» como se narra en un artículo de prensa publicado bajo el título de «Nos visita el hombre que ha educado a los más grandes hombres de Bolivia».
Benjamín Guzmán Castillo falleció en Cochabamba en 1931, a los cincuenta y siete años. Sus restos mortales y los de su esposa Carmen Careaga se encuentran en el Mausoleo de Notables, en el Cementerio General de Oruro.

Bibliografía consultada

Antezana, José, «Benjamín Guzmán C. Perfiles», en Ecos de un alma, Sucre, Imprenta “La Glorieta”, 1897.
Guzmán, Benjamín, Ecos de un alma, Sucre, Imprenta La Glorieta, 1897.
Guzmán, Benjamín, Cielo, Sucre, Tipografía Escolar, 1898.
Guzmán, Benjamín, Letras nacionales, 1914.
Guzmán, Benjamín, Para el hogar y la escuela, 1989.
Mujia, Ricardo, «Ante portam…», en Ecos de un alma, Sucre, Imprenta “La Glorieta”, 1897.


* El Castillo de la Glorieta: monumento nacional de Bolivia situado en las afueras de Sucre, sede del principado de la Glorieta, constituido por Clotilde Urioste y Francisco Argandoña Revilla, ambos príncipes honoríficos.



Autor: Wara Shirley Varela Oropeza
Fecha de publicación: 2024.