Dramaturgo y cuentista. Nació en Tupiza, en Potosí, en enero de 1928 y murió en La Paz (Bolivia) el 6 de noviembre de 1984. Su madre, María Paredes, era maestra rural aficionada a los románticos franceses y fue quien se hizo cargo de su educación tras la experiencia traumática del niño en primaria. Estudió Derecho, pero no ejerció, decidió dedicarse a las letras. Fue minero, camionero, ferroviario, empleado bancario, periodista y maestro rural. Fue colaborador y secretario de la revista Nova de La Paz. Se sintió escritor cuando vió publicado por primera vez un cuento suyo, «El perro rabioso», en el diario gubernamental La Nación, en los años 50. En 1967, la Municipalidad de La Paz lo premió por su obra de teatro. Cultivó también la narrativa corta, y recogió opinión favorable de la crítica. Recibió, por su novela Mallko (1941), una mención de honor del Premio Hans Christian Andersen de Dinamarca y fue elegida como texto escolar en España en 1981. Además de ser autor de novelas, compuso obras de teatro, un ejemplo de ello es Vértigo o el perro vivo (1967). Suárez también fue guionista de la película Mina Alaska, dirigida por Jorge Ruiz, con Chrysta Wagner y Hugo Roncal, y financiada por Mario Mercado y Gonzalo Sánchez de Lozada. Fue, además, autor de una única canción, Rosendo Villegas Velarde, popularizada por el guitarrista tupiceño Alfredo Domínguez, su amigo de infancia. En política, el general René Barrientos Ortuño le ofreció un ministerio, pero Suárez desistió de la propuesta. Lidia Gueiler le pidió que asumiera la embajada en España, y Suárez aceptó más por amor a España que por otra cosa, pero no llegó a cumplir tal cargo por el golpe de Estado de Luis García Meza. Óscar Rivera Rodas afirma, en 1972: «Suárez va más allá del simple hecho, más allá de la anécdota, y descubre sutilmente situaciones trascendentes. Agudo observador del comportamiento humano, es el escritor de la introversión psicológica de la nueva promoción de narradores bolivianos». Porfirio Diaz Machicao escribió para la primera edición del libro Vigilia para el último viaje (1963): «Ha llegado un hombre nuevo a la vera de mis preocupaciones literarias. Sinceramente, no le esperaba. Pero llegó. En el relámpago inusitado de la simpatía vi que era de buena raza y que en su lio de peregrino traía buena prosa. Le estreché las manos, le ofrecí acomodo para el descanso y presté oídos a sus relatos». En 1979, Año Internacional del Niño , publicó otra novela Las aventuras de Miguelín Quijano, en la que trabaja con metáforas y referencias a los personajes cervantinos para obtener una hermosa parábola que enciende la creatividad e imaginación de los niños e incita su interés por el libro inmortal El ingenioso hidalgo don Quijote de la Mancha.


Bibliografía consultada:
Guzmán, Augusto, Biografías de la nueva literatura boliviana, La Paz, Los Amigos del Libro, 1982.


Autor: equipo de la BPB.
Fecha de publicación: 2023.