Narrador, historiador, dramaturgo y político, Nataniel Aguirre González-Prada (o Gonzáles de Prada), nació el 10 de octubre de 1843 en Cochabamba (Bolivia), y falleció el 11 de septiembre de 1888 en Montevideo (Uruguay). Sus padres fueron Miguel María de Aguirre y Velasco y María Manuela González de Prada. En 1862 se graduó de abogado en la Universidad Mayor de San Simón (UMSS), en Cochabamba, y fundó el periódico El Independiente. El 30 de marzo de 1864 contrajo matrimonio con Margarita Achá, hija del entonces presidente de Bolivia, José María Achá (1861-1864).
La dicha matrimonial fue alterada por el golpe de estado contra su suegro, perpetrado por Mariano Melgarejo (28 de diciembre de 1864), contra quien Aguirre luchó activamente, participando en el combate de La Cantería (Potosí, 1869). Tras la caída del dictador fue elegido diputado por Cochabamba para la Asamblea Constituyente y, en 1880, presidió la Convención Nacional que aprobó una nueva Constitución Política del Estado. Iniciada la Guerra del Pacífico (1879-1884), fue nombrado prefecto de Cochabamba, organizó cuerpos militares y asistió a la guerra con uno de ellos: el escuadrón «Vanguardia». Fue nombrado también ministro de guerra del presidente Narciso Campero (diciembre de 1880- agosto de 1881).
De 1885 a 1887 fue jefe del Partido Liberal en Cochabamba. Ejerció, además, una cátedra de Derecho en la UMSS (Cochabamba). En 1888 su precaria situación económica y problemas hepáticos deterioraron su salud, obligándolo a vender su biblioteca. Ese mismo año fue designado ministro plenipotenciario en el Brasil, por el entonces presidente Gregorio Pacheco, cargo que no llegó a desempeñar puesto que falleció durante el viaje en la ciudad de Montevideo (Uruguay).
Como narrador se lo adscribe a la corriente del Romanticismo. Cultivó además el teatro, el periodismo, la poesía y la historia. Su consagración literaria llegó con la novela Juan de la Rosa (1885), inspirada en la Guerra de la Independencia y considerada como una de las más importantes en Bolivia. Varios de sus libros quedaron inconclusos y algunos inéditos a raíz de su muerte. Fue autor también de Documentos para la historia: el general José María de Achá (1871), Unitarismo y federalismo; breve examen de las doctrinas unitarias y exposición de la conveniencia de una inmediata reforma federal (1877), Bolivia en la Guerra del Pacífico (1882), El Libertador. Compendio histórico de la vida de Simón Bolívar (1883) y La bellísima Floriana (1911), entre otras.
Respecto a la obra de Aguirre, suscribe la crítica Alba María Paz Soldán: «Aguirre, escritor que pertenece plenamente el canon romántico, logra hacer pie en tierra de un modo que ninguno de los románticos logró. Es también por ello que la lectura de su novela Juan de la Rosa ha tenido la proyección que tuvo en el imaginario de la ciudad, pues demuestra que sí evidentemente, se trata de la sensibilidad romántica, pero en ella ya está impreso, legítimamente, un paisaje geográfico y humano determinado».
Para el escritor y crítico español, Marcelino Menéndez y Pelayo, (citado por Barnadas), la obra cumbre de Aguirre, Juan de la Rosa, «es la mejor novela americana del siglo XIX». Tatiana Alvarado Teodorika la explica en los siguientes términos: «Es una historia que se narra desde los recuerdos de infancia, es el descubrimiento de la identidad, una identidad que el narrador conoce pero que no revela al lector sino hasta el final del relato. Se siembran sutiles pistas en el relato: la madre criolla resulta ser mestiza, la sangre indígena que corre por sus venas es la de un artesano platero que, si bien “respeta al Rey y reconocía obediencia a Dios”, se rebela en nombre de la justicia; el quechua que conoce Juanito es el que conocía su madre, la lengua poética, la lengua retórica que se niega a que otros deformen. Así como el conocimiento hace del hombre un hombre bueno, no faltan los hombres llamados de ciencias que se sirven sólo en apariencia del conocimiento, en la misma medida, el quechua representa la voz del pasado, un pasado incorruptible, pero no por ello exclusivo».


Bibliografía consultada:
Alvarado Teodorika, Tatiana, «Juan de la Rosa, representaciones del otro y sentimientos identitarios», en Anuario n° 30, La Paz, Academia Boliviana de la Lengua, 2021, pp. 82-102. https://www.academiadelalengua-bo.org/spip.php?article259 (Consultado el 18 de marzo de 2023).
Barnadas, Josep, «Aguirre González-Prada, Nataniel», en Diccionario Histórico de Bolivia, Sucre, Tupac Katari, 2002, tomo I, p. 73.
García, Gustavo, «Juan de la Rosa: ¿Autor de Memorias del último soldado de la Independencia?», La Paz, Biblioteca del Bicentenario de Bolivia, 2016, pp. 13-39.
Paz Soldán, Alba María, «Memoria, imagen y ciudad en Juan de la Rosa de Nataniel Aguirre"», en Sed que no para. Ensayos reunidos (1982-2020), La Paz, Plural, 2021, pp. 67-84.

Autor: equipo de la BPB.
Fecha de publicación: 2023.